Autobuses

Hace un par de días me vi envuelto en una pequeña discusión con el conductor de una línea urbana de Sant Boi. El conductor se pasó la parada a pesar de que se la había solicitado con la mano haciendo un gesto claramente visible. Cuando me vió gesticulando por el retrovisor paró el vehículo y me abrió la puerta. Al entrar al autobús me reprochó que no le hubiera indicado la parada. Le contesté que lo había hecho pero que quizás no me había prestado atención pues estaba manteniendo una conversación con un pasajero que estaba de pie a su lado.

Lejos de reconocer su error, el conductor se dirigió a mi en voz alta diciéndome: "la próxima vez no le paro". De manera que este señor me obliga a cumplir con una norma inexistente (levantar la mano para pedir la parada) mientras por su parte incumple una norma clara que le obliga a no hablar con los pasajeros (encima del puesto del conductor se lee claramente una frase prohibiendo distraer al conductor).

Esta regla inexistente de tener que solicitar la parada es la causa de numerosas molestias para las personas usuarias del servicio de autobús urbano e interurbano. Cierto día, estando esperando el autobús en el aeropuerto, el conductor de la línea L77 se pasó la parada pues había un autobús estacionado delante y ni se detuvo a comprobar si había usuarios esperando. El "despiste" nos supuso media hora de espera después de un viaje de 10 horas.

Este verano se han colocado plataformas para facilitar el acceso a los autobuses. La iniciativa es de agradecer pues permiten a los usuarios con carritos de la compra o con cochecitos de bebé el poder subir y bajar de los vehículos con más comodidad. Era frecuente observar como estas personas eran depositadas a cierta distancia de las aceras y tenían que maniobran con dificultad para poder bajar del autobús. Cabe esperar que la totalidad de los conductores tengan a bien acercar los vehículos a las plataformas para facilitar el acceso.

Confiemos también en que la administración competente construya el resto de plataformas que ahora no se han colocado. Y de paso que completen la colocación los indicadores horarios y, a ser posible, que consigan que funcionen con normalidad.